La Casa Guadalupana: Un refugio para quienes desean seguir estudiando

Tomada antes de la pandemia casua del COVID-19, esta foto muestra hispanas de Detroit buscan superarse. (Foto cortesía de La Casa Guadalupana)

Bajo el cobijo de la Virgen de Guadalupe, hispanos de Detroit retoman el camino para cumplir sus sueños

DETROIT- La Casa Guadalupana se ha convertido desde hace varios años en un refugio para los que anhelan y desean seguir estudiando, es el lugar propicio para realizar estudios que permiten en una etapa posterior llegar hasta la Universidad. La Dr. Lourdes Torres Monaghan, directora ejecutiva y administradora de La Casa Guadalupana, compartio con Detroit Catholic en español sobre lo que este espacio hace.

La Casa Guadalupana comenzó su historia en junio de 2014 en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, sirviendo a la comunidad hispana del suroeste de Detroit. En el 2014, la hermana Marie Benzing, CSJ y el padre Mario (el párroco de Nuestra Señora de Guadalupe en 2014) comenzaron un programa de tutoría para estudiantes de primero a octavo grado.  Luego se añadió el programa de Educación para Adultos para completar la alfabetización familiar.  

Los programas que se imparten en La Casa Guadalupana son: Educación Básica para Adultos primaria, grados del primero al sexto y clases de preparación para el examen de secundaria para grados del séptimo al noveno grado y GED (Equivalencia de Escuela Superior/High School). 

También se ofrecen tres niveles de ESL, inglés como segundo idioma, junto con cuidado de niños por la mañana para aquellos estudiantes con hijos pequeños.  

Esto funciona como una guardería, lo cual es muy importante para aquellos que necesitan tomar clases y no tienen con quien dejar a sus hijos, La Casa Guadalupana cuenta con este servicio que evita que las mamás estudiantes se distraigan por la preocupación o angustia de no saber en dónde y con quien dejar a sus hijos. 

También La Casa Guadalupana cuenta con tutorías para niños estudiantes de 1 ° a 8 ° grado, lo que globaliza la alfabetización familiar.  

“Esta estrategia ayuda a nuestra comunidad a luchar por un cambio social para la comunidad latina que valora a la familia”, comparte Lourdes Torres Monaghan 

Cuando se piensan en los beneficios de este centro de estudios, se pueden imaginar muchos, y es que en estos tiempos donde la educación es muy costosa haciéndola inaccesible, o muchas veces por ser adultos se complica el seguir estudiando. 

La Casa Guadalupana se ha convertido en una alternativa económica por sus bajos costos, ya que permite dar acceso a comunidades y niveles de la sociedad con bajos recursos y vuelve accesible la enseñanza educativa para adultos por sus horarios y maestros expertos que permiten el combinar el trabajo con la oportunidad de seguir aprendiendo y avanzando en los niveles de aprendizaje. 

Desde 2016 más de cuarenta adultos han recibido su diploma de highschool, más de setenta adultos han obtenido certificado de escuela superior y alrededor de 150 estudiantes han completado clases de inglés. 

También se imparten clases sobre salud y seguridad en el hogar y en el trabajo, lo cual hace todavía más prácticos los beneficios para los alumnos.

Celina Díaz Morales, alumna de La Casa Guadalupana compartió con Detroit Catholic en español un poco de su experiencia de estudio. Ella es originaria de Jalisco en México y no concluyó la primaria, ya estando en Detroit anhelaba continuar con sus estudios y busco en internet en donde podía continuar y concluir sus niveles educativos, fue así que encontró este lugar.   

Desde el 2019 ingreso a La Casa Guadalupana y desde entonces ha logrado distinguirse por ser una alumna extraordinaria, pues ya se graduó de la primaria y la secundaria, ahora está tomando clases para el GED equivalente a la preparatoria, lleva materias ya aprobadas, este año anhela graduarse de este nivel.  

La Casa Guadalupana le ha cambiado la vida por completo a Celina Díaz, quien comparte que, “En la Casa Guadalupana los maestros son muy amables, tienen maestros muy bien preparados, son muy pacientes con los estudiantes, me cambió completamente la vida”. 

“Me siento más segura de mi misma al lograr lo que de niña no pude lograr, ahora con esfuerzo y sacrificio he podido. Mi pasión es la fotografía y quiero entrar a la universidad a estudiar fotografía de un nivel profesional” comenta Celina. “Si tú quieres tú puedes, yo estoy muy agradecida con La Casa Guadalupana ahí te van a ayudar a cumplir tus sueños”.  

El antes y después de la Pandemia 

Antes de marzo de 2020, antes del comienzo de la pandemia a causa del COVID-19, La Casa Guadalupana tenía clases presenciales por la mañana y por la noche.  Era un ir y venir de alumnos, cada salón de clase tenía entre cinco y quince estudiantes y al caminar por el pasillo se oía el bullicio de los estudiantes discutiendo los temas de clase, se escuchaba el bullicio de cómo se ayudaban unos a otros. 

Esto ha quedado en los recuerdos y en el pasado.  A La Casa Guadalupana también complementariamente, asistían conferencistas e impartían talleres de ayuda financiera así como de salud para las mujeres y niños.  

Hoy en día las clases se llevan a cabo en línea.  Los salones son más pequeños, no más de 10 estudiantes por clase y se equiparon con Chromebooks y Laptops que los estudiantes pueden usar ya sea en La Casa Guadalupana o en su casa.  Han adaptado todas sus actividades al mundo virtual, desde inscripciones y asesoría, hasta conferencias y todo tipo de comunicaciones.   

Pero la ayuda desde el comienzo de la pandemia no ha sido solo educativa por parte de la Casa Guadalupana, este centro de asistencia educativa también pasó a las acciones concretas por la emergencia sanitaria. 

Desde el comienzo del COVD-19 han ofrecido despensas para los miembros de la comunidad hispana, además proporcionando ayuda para familias con inseguridad de alimentos, vivienda, pagos de servicios públicos y recursos en español. Su ayuda se traduce en hechos, siendo mensajeros de la esperanza y la misericordia.  

Toda esta titánica labor no se entendería sin el patrocinio y providencia divina, es por eso que es importante saber cómo se sostiene La Casa Guadalupana. Lourdes Torres Monaghan explica, “Una gran parte de nuestros fondos vienen de organizaciones religiosas como La congregación de Saint Joseph y las hermanas Dominicas de Racine.”

“Afortunadamente recibimos fondos y materiales del Consulado Mexicano en Detroit. Tenemos dos eventos al año para recaudar fondos y nuestra comunidad aquí en Detroit y virtual de amigos hispanos siempre son muy generosas.  Como toda otra organización sin fines de lucro, invertimos mucho tiempo compitiendo por becas y pidiendo ayuda del estado y la ciudad”.  

Es muy importante que la ayuda siga llegando a La Casa Guadalupana, de ahí que la pandemia no ha impedido el que sigan buscando apoyo porque los gastos son altos y más con el proceso de conversión del sistema presencial al virtual, “Nuestra campaña para recaudar fondos este otoño se llamó Against All Odds (traducido a: contra todo pronóstico) porque así parecía la situación cuando comenzó el ciclo escolar en septiembre 2020”.  

“Fue necesario encontrar y proveer todos los servicios tecnológicos, como servicio Wi-Fi, computadoras, aplicaciones y materiales virtuales para que nuestros educandos pudieran continuar su educación” comparte Lourdes Torres Monaghan. “Muchas más personas de las que esperábamos se comprometieron a sobrepasar los obstáculos y seguir adelante con sus estudios. Así, en diciembre 2020 pudimos celebrar una graduación de 12 estudiantes que completaron sus metas educativas”. 

Teresa Martínez Guzmán, quien nació en el estado de Puebla en México, ha podido estudiar la secundaria y además se graduó del GED. Teresa comparte con Detroit Catholic en español su experiencia,  “Me gusta Casa Guadalupana porque todos son muy amables las maestras como también la directora, todos son personas muy amables, eso te anima a ir a la escuela y te dicen que si ocupas o si necesitas algo y tratan de ayudarte. Yo recomiendo a La Casa Guadalupana para ir para prepararte para tu GED, es muy buena escuela, es cómo si fuera mi segunda casa, ahí conoces personas de otros lugares de otros países y todos y todas con respeto”.  

Mayores informes 

Para obtener más información de La Casa Guadalupana o ver formas de apoyar puedes visitar su página de internet lcgdetroit.org o sus redes sociales: Instagram, su cuenta de Facebook en español o también la cuenta de Facebook en ingles.

Secciones
Inicio
Suscribir
Buscar