El Instituto Desarrollo y Persona de la Universidad Francisco de Vitoria, Madrid (España) ha lanzado el curso “iLove Aprendamos a amar”, en donde se explica a los padres algunas claves para hablar con los hijos sobre “el sentido de su sexualidad, y así, les estaremos hablando del sentido de su vida”, algo que encontrarán de manera clara y precisa en este curso. 

Eva Martínez, experta en educación afectivo-sexual con más de 10 años de experiencia explica a ACI Prensa que este curso nació “buscando ayudar a que se cumpliese el deseo que los padres llevamos en el corazón: que nuestros hijos sean felices”.

Según precisa Martínez “necesitamos pautas y herramientas concretas que nos permitan aprender a acompañarles a través de sus deseos, de sus emociones, de sus sentimientos. Hay mucho sufrimiento, porque a veces los padres hemos no sabemos cómo abordar los temas de amor y sexualidad”.

Acompañar a los hijos

“A los padres de nuestra generación no nos contaron nunca nada de esto, por lo que no tenemos referencias sobre cómo hacerlo. Por mi experiencia te diría que son tres los motivos que dificultan este diálogo:  el 'cuándo, el cómo y el qué'. Es decir, el miedo a adelantarnos y con ello eliminar la inocencia de nuestros hijos, el no saber cómo suscitar una conversación y hasta dónde llegar. Pero sobre todo, la pregunta que casi nunca nos hacemos es el ¿por qué?  Es decir, ¿Por qué es importante hablar de sexo? A esto precisamente respondemos en el curso, además de proporcionar pautas y herramientas concretas”, afirma la experta.

De ahí que Martínez insista en la importancia de la formación de los padres “para no seguir llegando tarde”.

“Hemos de impedir que otros eduquen a nuestros hijos: Internet, amigos, una sociedad hipersexualizada que ha banalizado el sentido de la sexualidad...”, asegura y además recuerda que “la educación de los hijos es tarea de los padres como primeros y fundamentales educadores”.

“Por el contrario, algunos padres dan por sentado que la sexualidad y su sentido crecerá en nuestros hijos al igual que crecen ellos. Pero esto es radicalmente falso. Hemos de hablarles del sentido de su sexualidad, y así, les estaremos hablando del sentido de su vida. Dentro del curso los padres encontrarán pistas muy concretas sobre esto”, insiste.

En todas las etapas educativas 

Además explica que la educación afectivo-sexual debe comenzar “desde el más tierno inicio de su vida. Siendo respetuosos por supuesto con el momento evolutivo de cada uno de nuestros hijos, pero en ningún caso postergando temas para “cuando sea mayor”, más bien, hay que hablar de “todo” adecuándonos al nivel de la personita que tenemos en frente”.

Por eso afirma que en el curso “Aprendamos a amar” los padres encontrarán “las claves para abordar con delicadeza estos temas” y les ayudará a “ser conscientes  de que nunca dejamos de educar, y que como padres ‘educamos más por lo que hacemos que por lo que decimos’”.

Este curso está destinado a padres con hijos en cualquier edad, “desde los más pequeñitos hasta los jóvenes adultos” porque “la adolescencia, pasan, pero la paternidad y la maternidad no. Siempre somos padres y madres. Parece que los hijos no nos escuchan, pero en realidad ‘nunca dejan de mirarnos’”.

Por ello Martínez subraya que “sea cual sea la etapa que estén viviendo nuestros hijos, es imprescindible acompañarles para que descubran el sentido pleno de su sexualidad. No digo que esto sea sencillo, pero como primeros protagonistas de la educación de nuestros hijos, es necesario ponernos a caminar hacia lo que todo  padre busca: la felicidad de nuestros hijos”.

El curso está impartido por expertos y profesionales del Instituto Desarrollo y Persona de la Universidad de Vitoria, Madrid. “Cada uno de ellos aporta una visión única desde su campo, Psicología, Educación, Sexología, Medicina, Sociología y Derecho. Pero me atrevería a decirte que lo que más nos significa, más allá de nuestra formación, es nuestra experiencia de más de 20 años como educadores y como padres. Para nosotros es importantísimo el ejercicio de la “paternidad” en aula junto a los miles de alumnos a los que acompañamos cada curso escolar”, asegura.

Además de encontrar “herramientas adecuadas para poder hablar de estos temas con libertad y naturalidad", y "también encontrarán acciones concretas para poder ayudarles a prevenir los riesgos y tristezas de una afectividad y sexualidad mal vividas”. 

E incluso, Martínez explica que “los padres que hacen el curso, ven reforzada su propia entrega matrimonial, lo cual es maravilloso educativamente, porque, como digo, nuestros hijos, aunque parezca que no nos escuchan, no dejan de mirarnos”. 

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