La comunidad católica ayuda a las víctimas del accidente en la autopista I-75 y pide apoyo

Crean un fondo para cubrir los gastos funerarios y médicos de la familia tras el accidente del 28 de julio que dejó cuatro muertos y un herido grave

ROYAL OAK — La comunidad católica está pidiendo oraciones y apoyo para una familia local devastada por un choque en la Interestatal 75 ocurrido la madrugada del 28 de julio. El accidente, causado por un vehículo que circulaba en dirección contraria, dejó cuatro muertos y un herido grave.

Según informes de prensa, un vehículo que circulaba en sentido contrario por los carriles hacia el sur de la I-75, cerca de 11 Mile Road en Royal Oak, chocó contra un automóvil que transportaba a una pareja y a los padres de ambos. Los tres hombres murieron en el acto y la mujer, María Argüello, sufrió heridas graves.

En el accidente murieron Suriel Galván-Argüello, de 34 años, de Troy, su padre, Celerino Galván-Martínez, de 54 años, y el padre de Argüello, Antonio Martínez-Saldívar, de 71 años. Los dos hombres mayores eran de México.

El conductor del vehículo que iba en sentido contrario, Adam Quillen, de 29 años, también murió. Las autoridades continúan investigando el accidente.

La policía estatal de Michigan, la policía de Royal Oak y el Departamento de Bomberos de Royal Oak acudieron al lugar.

“La familia se dirigía al aeropuerto porque uno de los hombres mayores tenía que tomar un vuelo temprano de regreso a México tras visitar a su familia en Michigan”, explicó el Diácono Aaron Poyer, capellán de la Policía Estatal de Michigan, a Detroit Catholic.

El Diácono Poyer dijo que respondió a una llamada de la policía estatal de Michigan la madrugada del domingo en el lugar del accidente y ayudó a notificar a los familiares sobrevivientes, que incluyen a la viuda de Galván-Martínez y a los dos hijos de la pareja más joven: un niño de 14 años y una niña de 8, quienes ahora enfrentan un dolor y una incertidumbre inimaginables.

“Los familiares llegaron de inmediato a Michigan, y afortunadamente muchos de ellos están ahora juntos aquí, apoyándose mutuamente”, dijo el Diácono Poyer. “El lunes, un sacerdote vino al hospital para administrar el sacramento de la Unción de los Enfermos a María en presencia de sus seres queridos”.

Argüello enfrenta una recuperación difícil que podría durar semanas o meses, según contaron otros familiares a los medios locales.

Los miembros de la comunidad católica están uniéndose para apoyar a la familia en este momento difícil. Los arreglos funerarios están siendo gestionados por Chas. Verheyden Funeral Homes de Clinton Township, que ha creado un fondo para ayudar con los gastos del funeral y los gastos médicos mientras Argüello sigue recuperándose en las próximas semanas y meses.

Aún no se han fijado los arreglos para el funeral.

Catholic Charities of Southeast Michigan se ha ofrecido a brindar apoyo emocional a la familia, según informó Paul Propson, director ejecutivo de Catholic Charities of Southeast Michigan.

“Catholic Charities of Southeast Michigan comparte el dolor de la familia y de toda la comunidad por la trágica pérdida de vidas causada por el accidente de la semana pasada”, dijo Propson. “Nuestros terapeutas están disponibles para brindar asesoramiento a María y sus hijos, y hemos pedido al Diácono Poyer que asegure a la familia que estamos dispuestos a ayudar en todo lo que necesiten”.

"Animamos a cualquier persona afectada de manera similar por la muerte repentina de un ser querido a buscar la ayuda de un consejero de Catholic Charities y a nunca permitir que el costo sea un impedimento para su recuperación”, añadió Propson.

El Diácono Poyer dijo que las familias Galván y Martínez, que son católicas, se sienten profundamente conmovidas por el apoyo de la comunidad católica y de otras personas en el área de Detroit, y están muy agradecidas por el amor y las oraciones recibidas.