El Llamado al Servicio Católico invita a los católicos locales a hacer una donación con "los ojos fijos en Jesús"

El llamado al Servicio Católico de la Arquidiócesis de Detroit, que inició el 5 y 6 de mayo, busca recaudar fondos para financiar ministerios vitales como la formación de seminaristas y las obras de caridad

Nota del editor: La Campaña de Servicios Católicos es esencial para la misión de la Arquidiócesis de Detroit. Financia y apoya a más de 100 ministerios que sirven a la Iglesia local en el sureste de Michigan, incluyendo Detroit Catholic. Visita www.givecsa.org para apoyar la misión haciendo una donación hoy. Agradecemos tu generosidad y oraciones.

DETROIT – A lo largo de los siglos, los santos y los mártires han proclamado la Buena Nueva de la salvación con la mirada fija en Jesús.

Sin Jesús, no existiría la evangelización ni las obras de caridad. Tampoco habría parroquias, escuelas católicas, sacerdotes o sacramentos, ya que todo se realiza a través de Él.

En la Arquidiócesis de Detroit, más de 100 ministerios, servicios y programas no existirían si no fuera por Jesucristo. “Probablemente tampoco existirían sin el Llamado al Servicio Católico, que financia los ministerios que reflejan el amor de Jesús por su Iglesia y el mundo”, dijo el Arzobispo Allen H. Vigneron al anunciar la campaña de CSA de este año, que comenzó el 5 y 6 de mayo en las parroquias de todo el sureste de Michigan.

"Una manera directa en que nosotros, como Iglesia local, ayudamos a compartir el amor de Cristo es respondiendo a las necesidades materiales y espirituales de las personas y las familias", dijo el Arzobispo Vigneron. "A través del Llamado al Servicio Católico, más de 100 servicios, programas y ministerios dan evidencia real y tangible del poder de la fe, de cómo manteniendo nuestros ojos fijos en Jesús puede ayudar a superar los obstáculos".

El nombre de este año, "Con los ojos fijos en Jesús", coincide con el lema episcopal del Arzobispo Vigneron, tomado de la Carta a los Hebreos: "Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, con la mirada fija en Jesús, el autor y consumador de la fe" (Heb 12,1).

El CSA, la campaña anual más grande de la Iglesia Católica en el sureste de Michigan, financia servicios y ministerios cruciales, como el respaldo a seminaristas y estudiantes laicos en formación en el Sacred Heart Major Seminary, becas para escuelas católicas y obras de misericordia destinadas a ayudar a los más necesitados de Detroit. Además, respalda actividades de evangelización que difunden la fe católica entre personas de diversas culturas y procedencias.

"Su donativo al Llamado al Servicio Católico ayuda a llevar la Buena Nueva a innumerables personas y familias", dijo el Arzobispo Vigneron.

A cada parroquia se le asigna una meta de recaudación basada en sus donaciones y colectas navideñas de los últimos tres años. También se consideran otros factores, como si la parroquia administra una escuela católica o proporciona asistencia financiera a feligreses que asisten a una. Las parroquias que superan su meta pueden quedarse con el 100% del excedente recaudado.

La mayor parte de los fondos se destinan al Sacred Heart Major Seminary, donde seminaristas como el Diácono Stephen Moening reciben apoyo para seguir su vocación sacerdotal.

"Quiero ser un sacerdote en quien la gente pueda confiar", dijo el Diácono Moening, de 27 años, un diácono transitorio de la St. Kenneth Parish en Plymouth, quien será ordenado sacerdote junto con otros cuatro compañeros para la Arquidiócesis de Detroit el 18 de mayo. "Quiero ser un sacerdote accesible, verdaderamente comprometido en servir a los demás. El Sacred Heart me ha brindado una formación sólida, permitiéndome discernir qué es la verdad, o más bien, Quién es la verdad".

El Diácono Moening recordó un momento crucial de su infancia en cuarto grado, cuando presenció cómo los sacerdotes de su parroquia bautizaban a nuevos católicos durante la vigilia pascual. Esto dejó una huella profunda en él.

"Vi a los sacerdotes bautizando a estas personas, acogiéndolas en la fe católica, y pensé: 'Vaya, realmente quiero hacer eso'", explicó el Diácono Moening. "Fue como un impulso interno en mi corazón que me decía que había algo especial allí y quería descubrir de qué se trataba".

Dos décadas más tarde, el Diácono Moening y sus compañeros están a punto de hacer realidad su vocación. Sin embargo, esto no habría sido posible sin el apoyo de los demás, dice, en particular del CSA, que ayuda a pagar los estudios y los gastos de los seminaristas.

"En el Evangelio, Jesús habla de dar fruto abundante. Al hacer una donación al CSA, estamos permitiendo que esta abundancia suceda", afirmó el Diácono Moening. "Cuando donamos al CSA, estamos velando por las generaciones futuras e invirtiendo en el futuro de la Iglesia".

El Llamado al Servicio Católico también financia ministerios especiales como la Office of Evangelical Charity de la Arquidiócesis de Detroit, que apoya obras de misericordia que responden a las necesidades físicas y espirituales de las personas en el sureste de Michigan.

El Diácono Alfredo "Fred" Guardiola, quien coordina el Ministerio de la Cárcel en la Women’s Huron Valley Correctional Facility en Ypsilanti, recibe apoyo a través de la oficina, la cual, según él, se preocupa profundamente por el bienestar de quienes están en prisión, en las calles y las familias que necesitan cubrir sus necesidades básicas.

El Diácono Guardiola trabaja para entrenar a más personas en la importante labor del Ministerio de la Cárcel, de modo que la Iglesia pueda recordarles a quienes están en la cárcel que Dios no los ha olvidado.

"Los que están en la cárcel tienen un profundo deseo y se sienten agradecidos cuando reciben al Señor en la Comunión. A través de este ministerio, podemos llevar el amor de Dios a aquellos católicos que han cometido un error", dijo el Diácono Guardiola. "Cuando hacemos esto, las palabras del Evangelio cobran vida: 'Estuve en la cárcel y me visitaste'".

El Diácono Guardiola trabaja junto con la Office of Evangelical Charity para organizar los suministros, coordinar las visitas y evaluar las necesidades de quienes se encuentran cumpliendo condenas muy largas.

"Cuando visito (a los que están en prisión), siento que hay una comunidad católica vibrante dentro de esas paredes, y ha sido una verdadera bendición poder comprobarlo", señaló.

Las donaciones al Llamado al Servicio Católico también permiten que los jóvenes se encuentren con Jesús a través de iniciativas especiales como la conferencia para jóvenes RISE, que cuenta con ponentes dinámicos, adoración eucarística y actividades de servicio para conectar a los jóvenes con su fe en un momento crucial en sus vidas.

Kathy Galbraith, encargada del ministerio de jóvenes en la St. Joseph Parish y una de las coordinadoras de RISE, ha visto cómo las vidas de los jóvenes son transformadas cuando descubren algo más grande que ellos mismos en Cristo y su Iglesia.

"Es fundamental ofrecer a los jóvenes espacios seguros donde no solo puedan explorar su fe, sino también conectar con otros jóvenes y sentirse bien consigo mismos", dijo Galbraith. "'Es algo muy lindo estar en una sala con 500 jóvenes que comparten la misma fe y se sienten entusiasmados por conocer más a Jesús'".

Galbraith describió la conferencia RISE como una experiencia transformadora para los jóvenes, quienes salen cambiados y listos para compartir su fe con sus compañeros.

"Tenemos que mantener a los niños conectados con la Iglesia, y no podríamos ofrecer estas oportunidades sin el apoyo de los donantes", dijo Galbraith.

El Llamado al Servicio Católico también respalda los esfuerzos de evangelización y fortalecimiento de la fe dentro de las comunidades minoritarias, para que aquellos que de otra manera podrían sentirse aislados encuentren el amor de Cristo de manera poderosa y dinámica.

“En Detroit, hay una importante comunidad católica de habla hispana que se encuentra en constante crecimiento, y eventos como la Conferencia Anual de Mujeres Hispanas y la Conferencia Anual de Hombres Hispanos ofrecen oportunidades para fortalecer la fe y los lazos dentro de la comunidad”, afirmó Claudia Serrato, presidenta de la Conferencia de Mujeres Hispanas.

“Cientos de mujeres asisten a la conferencia cada año, con cifras que van en aumento”, dijo Serrato.

"Como mujeres hispanas, venimos de una cultura diferente", dijo Serrato. "Yo nací en México y agradezco que la Iglesia Católica de Estados Unidos me haya abierto los brazos. Es muy importante brindar a las mujeres la oportunidad de conocer a Jesús". El año que viene será nuestra 15ª Conferencia Anual de Mujeres Hispanas, nuestra quinceañera, y queremos que sea un día muy especial de fe y riqueza cultural para todas".

Del mismo modo, Antonio Camino, tesorero de la Conferencia de Hombres Hispanos, dijo que ofrecer una conferencia específicamente para hombres de habla hispana les ayuda a ver a Cristo en los demás y a compartir su fe, algo que puede ser más difícil para los hombres en los contextos parroquiales tradicionales.

"Gracias al apoyo de la Oficina del Ministerio Hispano, podemos ofrecer una conferencia anual para que los hombres hispanos se reúnan para fortalecer lazos dentro de su comunidad, alabar y adorar", dijo Camino. "Tenemos tiempo para la reflexión y la adoración, y celebramos la Misa. Es una oportunidad para crecer e inspirarse, pero también para encontrase con Jesús junto con otros hombres católicos".

Entre otras muchas iniciativas, el Llamado al Servicio Católico también respalda varios ministerios pro-vida y de planificación familiar natural, así como actividades de alcance universitario, ministerios matrimoniales y esfuerzos de comunicación. Esto incluye proyectos como Detroit Catholic, Unleash the Gospel, así como una variedad de podcasts, transmisiones en vivo y actividades de evangelización, como la campaña ESTOY AQUÍ.

Para obtener más información sobre cómo el CSA apoya a la Iglesia Católica en el sureste de Michigan, o para realizar un donativo, visita www.givecsa.org.

El Arzobispo Vigneron expresó su gratitud hacia aquellos que continúan apoyando los esfuerzos misioneros de la Iglesia, los cuales son una expresión de su fe en Jesús, afirmó.

"Estoy muy agradecido por las muchas maneras en que han contribuido a esta labor en el pasado. Por favor, consideren en oración renovar su apoyo este año", dijo el Arzobispo Vigneron. "Es hora de que corramos esta carrera como una comunidad de creyentes con la mirada fija en Jesús, para que las generaciones futuras puedan conocer a Jesucristo y compartir la misma fe con la que hemos sido tan bendecidos".