Profesor en Detroit crea mural con santos que inspiran a los estudiantes

El mural iconográfico del profesor de Cristo Rey, Jeremy Alexander, presenta a 37 santos diversos, artistas, poetas y líderes de derechos civiles

DETROIT — Kim Redigan solía asomarse por la ventana de la capillita de la Detroit Cristo Rey High School mientras rezaba.

No obstante, el verano pasado, instalaron unidades de aire acondicionado de gran tamaño justo afuera de la ventana y, así de repente, se obstruyó la vista del barrio en el suroeste de Detroit, donde vivían muchos de los estudiantes de la escuela.

Redigan, director de pastoral en Cristo Rey, se sintió consternado al notar que la capilla había perdido parte de su belleza. Necesitaba color y vitalidad, algo que le diera la calidez que siempre le proporcionaba la vista del barrio.

Ingresa Jeremy Alexander, un profesor de Teología de segundo año en Cristo Rey que se había enseñado a sí mismo el arte de la iconografía. Alexander estuvo de acuerdo con la evaluación de Redigan, y ambos decidieron que un mural ayudaría a restaurar una atmósfera propicia para la oración y la reflexión en el espacio.

Después de discutir el proyecto con los directivos de la escuela, compartieron sus ideas. ¿No sería maravilloso representar a santos y otras personas que inspiren a los estudiantes afroamericanos y mexicanoamericanos en Cristo Rey? ¿Y retratar a artistas, poetas y líderes de derechos civiles a veces olvidados? ¿Y no sería una bendición tener el mural terminado para el Día de Todos los Santos el 1 de noviembre?

Ya era mediados de julio, así que Alexander comenzó a trabajar. Empezó con un dibujo de Nuestra Señora de Guadalupe y añadió a San Juan Diego directamente debajo. Luego, uno por uno, añadió más figuras en su distintivo estilo bizantino.

"Quería retratar una imagen de la comunión de los santos", dijo Alexander a Detroit Catholic. "Una vez que comencé, creció a partir de ahí".

Algunos maestros de Cristo Rey sugirieron otras figuras para que Alexander las incluyera. Un amigo jesuita señaló que un mural católico en Detroit no podía omitir a Santa Ana, así que la añadió.

Al final, el mural incluyó a 37 hombres y mujeres, entre ellos Santa Kateri Tekakwitha, el Dr. Martin Luther King Jr., San Juan Diego, San Ignacio de Loyola, Santa Elizabeth Ann Seton, el Padre Mychal Judge, el Beato Solanus Casey, Sor Juana Inez de la Cruz, Thomas Merton, Dorothy Day y la Hermana Teresa Maxis, IHM.

“Tenemos santos canonizados en el mural, y personas a las que describiría como canonizadas en nuestros corazones”, dijo Redigan. “Abarca todo el espectro e incluye a algunos de nuestros santos afroamericanos a quienes esperamos que sean canonizados”.

Mientras Alexander pintaba en la capilla, los estudiantes se detenían a rezar durante el día escolar o después de las clases. Él encontró el proceso catártico. Algunas noches, cuando estaba absorto en el proyecto, trabajaba hasta las 10 p.m.

"En mi opinión, es un regalo del corazón para esta comunidad", dijo Alexander. "Cuando fui contratado aquí por primera vez, fue como un sueño hecho realidad. Quería enseñar Teología en la preparatoria con tanta intensidad, y me sentí afortunado de tener esta oportunidad. Los chicos son tan amables, y la comunidad alrededor de la escuela es muy amorosa".

Alexander conoció de primera mano la solidaridad de los vecinos y la comunidad escolar cuando su edificio de departamentos se incendió en mayo. Se quedó sin un lugar donde hospedarse.

"Los maestros y las familias de la escuela aportaron generosamente para ayudarme en ese momento, y algunos que ayudaron tenían poco ellos mismos", comentó. "Y pensé, 'Esto es la Iglesia, justo aquí'. Así que el mural es mi regalo de agradecimiento".

Alexander terminó el mural durante la tercera semana de octubre. En la Solemnidad de Todos los Santos, el 1 de noviembre, el Padre Trevor Rainwater, SJ, lo bendijo después de una misa celebrada en la capilla. Desde entonces, los estudiantes han pasado tiempo allí contemplando el mural mientras rezan o comparten sus alegrías y tristezas con Redigan, cuya pequeña oficina se encuentra detrás de una partición en un extremo de la capilla.

Alexander espera que cualquier persona que visite la capilla, ya sea estudiante, profesor, padre de familia o visitante, se inspire con las historias de las personas representadas en el mural.

"Es muy fácil pensar en los santos como los apóstoles o Nuestra Señora, como elevaciones inalcanzables de hace 2,000 años", dijo Alexander. "Pero muchas de las personas en el mural son aquellas que se parecen a las personas de esta comunidad y que lidiaron con la vida real, que tuvieron días buenos y malos, pero nunca dejaron de buscar la perfección y la santidad.

"Para cada persona que entra, es un reconocimiento de que también pueden ser santos", agregó Alexander. "No importa que sea (2024) y no el año 33 d.C. Están llamados a ser santos".