Durante 30 años, el programa de educación religiosa de la parroquia de Grosse Pointe Park, ha utilizado Halloween para enseñar a los niños sobre los santos.
GROSSE POINTE PARK — Durante los últimos 30 años, el domingo anterior a Halloween, la parroquia de St. Ambrose en Grosse Pointe Park, ha presentado una hermosa exhibición de calabazas frente a la iglesia.
Sin embargo, las decoraciones de otoño de la parroquia no son las típicas calabazas talladas de Jack-o-lantern (calabazas de Halloween) que se han convertido en sinónimo de la víspera de Todos los Santos. En cambio, la exhibición de la parroquia mira hacia el día siguiente, el Día de Todos los Santos, con calabazas decoradas a semejanza de los santos.
Las calabazas santas son decoradas por los diferentes grados de educación religiosa de la parroquia, desde jardín de infantes hasta noveno grado, entre las misas matutinas. Padre Tim Pelc los incluye durante su homilía en la Misa de las 11:15 am e invita a los niños a presentar su santo a la parroquia.
“Halloween es un día de origen mixto, cristiano y no cristiano, y esta es una forma de catequizar y mostrar que todavía puedes divertirte con Halloween de una manera santa”, expresó el Padre Pelc a Detroit Catholic.
El Padre Pelc elige a los santos cada año, a menudo en función de un tema diferente.
“Fueron los santos de la pandemia hace dos años, y luego tuvimos santos trabajadores de la salud, y ha habido santos estadounidenses, y luego también santos antiguos”, dijo Kelly Woolums, directora de educación religiosa en St. Ambrose.
Este año, el Padre Pelc eligió santos que son patrones de ocupaciones laborales específicas, dijo Woolums. Luego ella asigna los santos a cada clase en función de lo que están aprendiendo o según la edad apropiada.
Los niños decoran las calabazas con cualquier material de artesanía que puedan encontrar, dijo Woolums, y los maestros a menudo traen artículos adicionales de casa.
Los santos de este año incluyeron a San Ambrosio (Jardín de Infantes), Santa Marta (Primer Grado), San Juan Bautista (Segundo Grado), Santa Zita (Tercer Grado), San Juan de Dios (Cuarto Grado), Santa Verónica (Quinto Grado), Santa Edith Stein (Sexto Grado), Santa Kateri Tekakwitha (Séptimo Grado), Santa Katherine Drexel (Octavo Grado) y San Carlos Borromeo (Noveno Grado).
Al Jardín de Infantes casi siempre se le asigna a San Ambrosio como una forma de presentarles al patrón de su parroquia, dijo Woolums. Los alumnos de noveno grado están a punto de ser confirmados, por lo que se les dio a San Carlos Borromeo, quien es el patrón de los catequistas, explicó.
“Nunca antes habíamos hecho a Juan el Bautista, y la clase de segundo grado está aprendiendo sobre los sacramentos de la primera reconciliación y la primera comunión, por lo que comienzan con el bautismo, y la historia de San Juan Bautista les impacta de gran manera”, dijo Woolum. “Es una tradición que se remonta a mucho tiempo atrás, y creo que las familias lo recuerdan año tras año. Los padres de algunos niños recuerdan cuando a ellos les tocó hacerlo”.
Además de ser una tradición divertida, las calabazas santas también son parte de una recaudación de fondos. Después de la misa, se invita a los feligreses a votar por su calabaza favorita donando dinero en un frasco asociado con la calabaza santa de su elección. El dinero recaudado se destina al comunidad de St. Vincent de Paul en St. Ambrose.
Los santos ayudan a los fieles a comprender que el Señor puede conducir a las personas por muchos caminos diferentes de santidad, les dijo el Padre Pelc a los niños durante su homilía. Todo el mundo está llamado a ser santo, recalcó.
“Los santos vienen en diferentes tamaños y formas, y el llamado a la santidad es universal”, dijo el Padre Pelc. “Si le preguntas a cualquiera de estos individuos que presentamos hoy si es un santo o no, podría decir 'no'. Pero eran (santos) porque usaron todo lo que estaba a su alcance para seguir al Señor y mejorar las cosas para el resto del mundo, y eso es lo que estamos llamados a hacer”.
No elegimos santos patronos; los santos patronos nos eligen, añadió el Padre Pelc.
“Si algo acerca de uno de estos santos te provocó algo, honra a ese santo”, dijo el Padre Pelc. “Pronuncia una oración y tráelos a tu conversación con Dios. Son capaces de ayudarnos porque la vida no se acaba; sino que cambia. Entonces estos son los individuos que están ahí al oído de Dios para poder darnos consejos y darnos entrada en el reino de Dios”.