Cientos de mujeres hispanas se reunirán el 12 de octubre para un día de oración, formación y fraternidad
DETROIT - El próximo domingo 12 de octubre, cientos de mujeres hispanas de toda la Arquidiócesis de Detroit se darán cita en el Ford Community & Performing Arts Center de Dearborn para celebrar la 16ª Conferencia de Mujeres Hispanas, una jornada de oración, formación y fraternidad que desde hace tiempo se ha convertido en un verdadero faro de esperanza para la comunidad.
El encuentro está dirigido a mujeres de 13 años en adelante (las menores deben asistir acompañadas de un adulto). A lo largo del día se ofrecerán conferencias, música de alabanza, adoración eucarística, confesiones, dinámicas comunitarias, espacios de información sobre ministerios y mesas con recursos pastorales. Además, el Obispo Auxiliar Jeffrey E. Monforton presidirá la Santa Misa. También se contará con desayuno ligero y almuerzo incluidos en el costo de inscripción.
Brenda Hascall, Coordinadora del Ministerio Hispano en la Arquidiócesis de Detroit, explicó a Detroit Catholic en español que el lema de esta edición, Mujer Peregrina en el Amor de Jesús, surgió después de un tiempo prolongado de discernimiento en comunidad:
“La temática surgió después de varias reuniones y mucha oración buscando en la Palabra de Dios el versículo bíblico que fundamentara las pláticas en el contexto de la vida de la mujer hispana en Detroit. Las palabras del versículo bíblico de Ruth 1,16 abrieron la puerta a la realidad del Año del Jubileo, de la esperanza que ponemos en Dios en nuestro peregrinar”.
La cita bíblica “Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios”
inspira no solo el contenido de las conferencias, sino también la actitud con la que las participantes son invitadas a vivir este día: confiando en el amor de Dios que renueva, sana y fortalece a cada mujer en su caminar cotidiano.

Invitados especiales
Este año, las presentaciones estarán a cargo de Paola Alzate, misionera de la Arquidiócesis de Manizales (Colombia), quien compartirá la experiencia de evangelización que desarrolla junto a su esposo, el cantautor católico Andrés Echeverri.
Paola ha servido en comunidades eclesiales, pastorales juveniles, movimientos como Emaús y Comunidad María Mediadora, y actualmente colabora en el ministerio católico Fe Más Vida, produciendo contenido digital para la evangelización.
Junto a ella estará el doctor Juan F. López, psiquiatra católico nacido en Cuba y radicado en Ann Arbor. Desde hace décadas está comprometido con el ministerio hispano y de inmigrantes en la Diócesis de Lansing, donde ha organizado y dirigido retiros, talleres y charlas en parroquias y conferencias. Su experiencia integrando la fe y la salud mental ofrece un aporte muy valioso para las participantes.


Testimonios que inspiran
Más allá de los conferencistas y el programa, lo que da vida a esta conferencia son los testimonios de las mujeres que la han vivido. Eida Barberena Aguilar, originaria de Nicaragua y residente en Detroit desde hace 25 años, asistió por primera vez el año pasado junto a su hija menor de 14 años, porque considera que los jóvenes son el futuro de la Iglesia y que es necesario contrarrestar los conceptos contrarios a Dios que las sociedad muchas veces les enseña. Para ella, la experiencia fue transformadora:
“Soy mamá soltera de tres hijas. La mayor ya está casada, la segunda estudia en la universidad y la menor fue conmigo a la conferencia. Yo empecé a participar en el grupo de Guadalupanas hace dos años, después de haber conocido a la Virgen de Guadalupe en un viaje a México. La conferencia me encantó. Cada persona está ahí por un motivo, con sus problemas y sus luchas, pero todas somos hijas de la Virgen, mujeres luchadoras”.
Además exlicó que en su vida ha atravesado momentos difíciles, y que espacios como este le devolvieron la esperanza:
“Yo fui maltratada. En esos momentos de la vida no sabes si existe Dios o la Virgen. Pero en la conferencia sentí la presencia del Espíritu Santo y de María. Ahí descubrí que no estamos solas: Dios y nuestra Madre están con nosotros, además de tantas otras mujeres dispuestas a ayudarnos”.
Su testimonio refleja el impacto profundo que este evento puede tener en la vida de las participantes, especialmente cuando se vive en comunidad y en un ambiente de fe.
Otra asistente, Heidy Rodriguez, conoció la conferencia gracias a su grupo de Emaús y también la vivió por primera vez en 2024:
“Fue muy bonita. Los temas nos tocaron profundamente. A veces creemos que ya hemos sanado nuestras heridas, pero te das cuenta de que es necesario volver a perdonar y dejar que Dios actúe. Eso me ayudó a acercarme más a la Iglesia y a fortalecer mi fe”.
Heidi también destacó la excelente organización:
“Todo estaba muy bien pensado: la acogida, la comida, la atención a los detalles. Pasé un día muy agradable. Creo que la Arquidiócesis de Detroit brinda muchas oportunidades para acercarse a Dios, y esta conferencia es una de las más valiosas”.


Un camino de fe
Desde su primera edición, la Conferencia de Mujeres Hispanas se ha consolidado como un espacio de encuentro único. Año tras año, mujeres de distintas edades, países de origen e historias de vida llegan con sus cargas y preocupaciones, y se encuentran con un ambiente de oración y fraternidad que las renueva.
El tema de este año, “Mujer peregrina en el amor de Jesús”, busca subrayar que toda mujer camina con esperanza, sostenida por la fe y fortalecida por la comunidad. En palabras de los organizadores:
“En nuestro peregrinar de la vida, Jesús es el manantial de amor inagotable que nos acoge en una constante conversión y nuevo comenzar. Él es la fuerza renovadora que alivia nuestras cargas, dándonos esperanza y gozo. Nosotras somos sus instrumentos de amor que vamos como discípulos misioneros en nuestras familias, comunidades y el país en el que vivimos”.
La 16.ª Conferencia de Mujeres Hispanas es una oportunidad para detenerse en medio de la rutina, escuchar la voz de Dios y compartir la fe con otras personas que caminan en la misma dirección.
Con esa certeza, la Arquidiócesis de Detroit abre las puertas a todas las mujeres hispanas de la región para vivir este día especial de fe, esperanza y hermandad.